Se le conoce como mercados internacionales al conjunto de actividades y/o acuerdos comerciales realizadas entre diferentes países.

Canadá y Estados Unidos reanudan diálogo sobre el TLCAN

Informador / AFP / Septiembre 11

 

Chrystia Freeland Y Robert Lighthizer se reunirán el martes en Washington

La canciller de Canadá, Chrystia Freeland, se reunirá el martes con el representante estadounidense de Comercio, Robert Lighthizer, en Washington para retomar las negociaciones para rediseñar el TLCAN, informó este lunes un portavoz canadiense.

Las dos partes cerraron el viernes dos semanas de negociaciones, pero sin llegar a un acuerdo que permita a Canadá mantenerse en el TLCAN. Entonces no se anunció una fecha para retomar las charlas.

México y Estados Unidos ya llegaron a un acuerdo a finales de agosto y Washington informó al Congreso que pretende firmar un nuevo acuerdo el 30 de noviembre, con la perspectiva de que Canadá forme parte del mismo.

Pero Ottawa y Washington negocian con dificultad una nueva versión del TLCAN, suscrito en 1994 entre Canadá, Estados Unidos y México. Las conversaciones se iniciaron a demanda del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien considera que el pacto es «uno de los peores acuerdos comerciales de la historia» de su país.

Trump exige que Canadá se abra más al mercado estadounidense, principalmente en productos agrícolas.

 

Informador / AFP / Septiembre 11

 

La «carambola» que provocará el TLCAN en México

Dinero en Imagen / Lindsay H. Esquivel / 3 Septiembre

 

CIUDAD DE MÉXICO.- La entrada en vigor del nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) impactará de manera favorable en la atracción de inversiones y abonará a la competitividad de las empresas, sin embargo, la industria automotriz y las cadenas de valor ligadas a este sector se verán perjudicadas.

Analistas consultados por Excélsior, explicaron los efectos que tendría sobre la economía mexicana el nuevo pacto acordado entre México y Estados Unidos, y al cual se podría sumar Canadá en los próximos días.

Arnulfo Rodríguez, economista principal de BBVA Bancomer, comentó que con el nuevo marco legal en materia de comercio con Norteamérica, la inversión privada, tanto doméstica como extranjera, eventualmente recuperará su dinamismo, porque la mayor certeza permitirá la ejecución de nuevos proyectos de inversión y la puesta en marcha de aquéllos que habían sido aplazados por la incertidumbre.

“Dado que habrá mucha mayor claridad en la relación comercial con Estados Unidos, el principal socio comercial de México, el impulso externo de un mayor crecimiento global se traducirá en un relativo mayor crecimiento económico para el país”, dijo.

Manuel Molano, director general adjunto del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), precisó que con las nuevas disposiciones, las redes de proveeduría local se reconfigurarán ante un cambio necesario, lo que llevará a fabricar de manera distinta para cumplir con el tratado y con ello ganar competitividad.

Yamel Cado, socia líder de Comercio Exterior de PwC, sostuvo que los sectores más beneficiados serán los ligados al sector energético, los de comercio electrónico y la agricultura, ya que resultaron favorecidos con la renegociación del TLCAN.

“Haber incluido al sector energético en el acuerdo es positivo, ya que refuerza a la reforma, lo cual significará un mayor ritmo de inversión, intercambio comercial y de creación de empleos”, señaló.

Mientras que, el sector agrícola es de los más beneficiados al eliminarse la cláusula de temporalidad agrícola y mantener sin aranceles ni cupos  los productos mexicanos.

EFECTOS NEGATIVOS

Los expertos coincidieron que la industria automotriz y los sectores ligados a ésta serán los que recientan los efectos negativos del nuevo TLCAN, debido a que se implementaron reglas “más restrictivas”.

“Es previsible que las cadenas de valor se vean afectadas en el mediano y largo plazo por las nuevas reglas, debido al incremento en el contenido regional mínimo para no pagar aranceles de 62.5% a 75%”, dijo Rodríguez.

Para Molano, “la industria automotriz va a sufrir en el corto plazo por el cambio de reglas” pues recordó que 70% de los autos fabricados en el país van al mercado estadunidense y al menos 14 subsectores de la industria manufacturera dependen de la producción de vehículos.

De ahí que el incremento en el contenido regional tendría que darse de manera paulatina para que sea favorable y no cause distorsiones, o de lo contario implicará un incremento de los costos de bienes intermedios en el corto plazo, hasta que la región mejore su competitividad respecto al resto del mundo.

Los expertos consideraron que la nueva disposición, que establece que 40 a 45% de las piezas de un automóvil sean manufacturadas en países en donde la mano de obra obtenga salarios de al menos 16 dólares la hora afectará
únicamente a México.

 

Dinero en Imagen / Lindsay H. Esquivel / 3 Septiembre

 

“La integración de los equipos de EPN y AMLO en la negociación es madurez de México”: Jesús Seade

Sin Embargo / Por Redacción / 27 Agosto 

 

La duración del acuerdo alcanzado entre México y Estados Unidos en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) será de 16 años y no de cinco como proponía el Presidente Trump, así lo confirmó el representante comercial de EU, Robert Lighthizer. El pacto contempla revisiones cada seis años, en las que se podrán añadir prórrogas de otros dieciséis años, si las partes lo acuerdan.

Ciudad de México/Washington, 27 agosto (SinEmbargo).–  “Hoy es un buen día para México en materia de comercio internacional”, dijo esta tarde Luis Videgaray Caso, Secretario de Relaciones Exteriores, al iniciar la conferencia de prensa en la que estuvieron presentes Jesús Seade Kuri, integrante del equipo de Andrés Manuel López Obrador; Ildefonso Guajardo Villarreal, titular de la Secretaría de Economía, y Juan Pablo Castañón Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).

“Si por alguna razón el Gobierno de Canadá y EU no llegaran a un entendimiento, hoy lo que sabemos los mexicanos es que habrá un acuerdo con Estados Unidos”, explicó Videgaray.

El representante del Presidente electo Andrés Manuel López Obrador, Jesús Seade, dijo que la integración de los equipos saliente y entrante para estas negociaciones es una demostración de la madurez democrática del país, que a pesar de haber un cambio de gobierno trabajaron juntos. “Gana México. Estamos muy contentos con todo lo logrado”, dijo Seade. “Quiero en particular celebrar el hecho de que hayamos podido colaborar de una forma tan maravillosamente efectiva, solidaria, de equipo único, con el distinguido equipo del Presidente Enrique Peña Nieto. Es un ejercicio de cooperación que me llena de orgullo, que me llena de satisfacción, que en sí mismo es una magnífica señal para México”.

“Muestra –agregó– que México es un país muy maduro como economía como economía y muy maduro como democracia, que puede tener cambios de orientación sin que esto signifique en lo absoluto un drama para el área económica ni una fuente de incertidumbre”.

“Ha sido muy satisfactorio haber estado en esta batalla y haberla sacado hasta ahora”, reiteró Seade y agradeció a Videgaray y a Guajardo, a quienes llamó “mis amigos y compañeros de lucha”.

Sobre el tema energético, que causó discrepancias entre los equipos negociadores mexicanos, Seade explicó: “El Presidente electo ha sido muy claro desde toda su campaña que él no va a echar para atrás la Reforma Energética, y eso incluye los contratos. Él políticamente expresó su opinión contraria a esa Reforma, pero la respeta. Lo que él sentía era que él no podía políticamente avalar un tratado en el que una gran parte del lenguaje era copia de esta Reforma. Él decía busquemos la forma de tener el mismo contenido, dejando claro las facultades del Gobierno mexicano, pero no haciendo un copiado literal de la Reforma Energética que simbólicamente sería avalarla”.

Hoy se dio a conocer el principio de acuerdo comercial entre Estados Unidos y México, que tendrá una vigencia inicial de 16 años, según explicó el Representante de Comercio Exterior estadounidense, Robert Lighthizer.El pacto contempla revisiones cada seis años, en las que se podrán añadir prórrogas de otros dieciséis años, si las partes lo acuerdan.

Los negociadores estadounidenses y mexicanos llegaron también a un pacto sobre las reglas de origen de los automóviles, pero “no se tocó” el tema de los aranceles de Estados Unidos al acero y aluminio de México, y por tanto seguirán en vigor, dijo Lighthizer.

“Vamos a sustentar el aterrizaje en algunos sectores. Primero, el entendimiento es en un fortalecimiento de las reglas de integración. Segundo, logramos cambiar un posicionamiento original que demandaba 50 por ciento del contenido regional en un nuevo concepto que se mueve a un concepto de interacción de zona de Alto Salario, que se maneja en el 40 por ciento dependiendo del tipo de vehículo, pero que deja el 60 por cieno para hacerlo en cualquier otro lugar y un 40 que en un momento determinado se puede hacer en Canadá y EU”, explicó Ildefonso Guajardo sobre el acuerdo en el sector automotriz.

“Las negociaciones han sido intensas y esperamos que en esta semana así sigan siendo para lograr el acuerdo trilateral. Nos genera la plataforma para traer y desarrollar tecnología en México. Es un paso importante para la competitividad de México y me parece que los pequeños, medianos grandes empresarios estamos comprometidos”, dijo el presidente del CCE, Juan Pablo Castañón.

“México ha dado el testimonio de que unidos salimos adelante, haciendo cada quien lo que nos corresponde, y así debemos seguir”, destacó Castañón.

En la ronda de preguntas y respuestas, Guajardo explicó que “los temas más álgidos tenían que ver con la definición del capítulo 20 y el aterrizaje de los temas automotrices eran los dos temas pendientes para México. En el tema automotriz tuvimos que definir los escenarios”.

Guajardo también explicó que México no se moverá de Washington hasta que Canadá se incorpore para participar en la negociación trilateral. “Seguiremos en Washington toda la semana”.

Sobre los aranceles al acero y aluminio que EU impuso a México y Canadá, el titular de la SE dijo que este tema se platicó y acordaron retomarlo más adelante. “Las cuotas se mantienen sobre el acero mexicano”, dijo, pero “no dejamos la posibilidad de vislumbrar posibles soluciones, no es un tema que se haya resuelto en este proceso”.

“Este tratado establece las premisas que fueron comprometidas con el Senado de la República: mejora la relación con América del Norte, preserva la certidumbre de que México no aceptó cuotas ni restricciones ni tarifas en el comercio y genera las bases para poner los atractivos de México en la economía”, dijo Guajardo.

En la solución de controversias, ante la posibilidad de la eliminación del capítulo 11, éste se mantiene para poder dar certidumbre, explicó. En el sector agrícola hoy queda fortalecido y se elimina la sombra o amenaza de un mecanismo de subsidios; lo que genera confianza entre las compras de México al campo estadounidense y viceversa.

El Canciller mexicano hizo un reconocimiento a los integrantes del equipo negociador del TLCAN y resaltó la integración del equipo del Presiente electo Andrés Manuel López Obrador en estas negociaciones. “Jesús Seade es un experto en la materia, un verdadero conocedor del tema”, dijo Videgaray y agradeció a Marcelo Ebrard, próximo Secretario de Relaciones Exteriores de México.

“Lo más importante es que cumpliendo con estas reglas de fortalecimiento, que está confirmado que el 70 por ciento de las exportaciones mexicanas la cumplirán y para ellos el arancel será a cero tasa, sin ningún tipo de limitación”, agregó.

“He estado platicando con muchos de los representantes del sector privado, y me agrada mucho constatar que un área en la que salimos ganando, es el área de productos químicos. Queda claramente reforzada. Quisiera celebrar muy en particular no solo lo logrado. Quiero celebrar el hecho de que hayamos podido colaborar en un forma tan maravillosamente solidad de equipo único con el equipo del Presidente Enrique Peña Nieto. Éste es un ejercicio de cooperación que me llena de orgullo”, dijo Seade.

“Esta negociación no puedo haber llegado a buen puerto sin un acuerdo con la iniciativa privada”, reconoció el Canciller. “Quiero agradecer a Juan Pablo Castañón, presidente del CCE y Moisés Kalach Mizrahi, integrante del equipo negociador por parte de la iniciativa privada.

“Primero quiero compartir con ustedes dos elementos fundamentales para este proceso (del TLCAN). El espacio para que pudiéramos negociar lo dio el Presidente de la República y en segundo, el apoyo del Canciller Luis Videgaray y su equipo”, dijo Ildefonso Guajardo.

Donald Trump, Presidente de Estados Unidos, confirmó en la Casa Blanca el cierre de las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y México. Pero no hay tratado trilateral. Falta Canadá. Ahora, dijo Trump, “haremos un trato con Canadá. Es un segmento más pequeño el que hay que negociar”.

“Daremos por terminado el TLCAN para dar paso a este nuevo acuerdo, vamos a empezar a negociar con Canadá. Yo sé que Canadá tiene mucho interés en negociar, pero hay muchos puntos que tenemos que limar”, señaló el Presidente de Estados Unidos.

Trump habló con el Presidente mexicano Enrique Peña Nieto durante la conferencia. Dijo a los asistentes que el acuerdo ahora se llamará “acuerdo comercial entre EU y México” y ya no tendrá el nombre anterior. “Este es un tratado muy positivo para ambos países”, dijo Peña.

“Es nuestro deseo”, añadió Peña, “que Canadá pueda ahora incorporarse a este acuerdo. Asumo que ellos estarán evaluando”.

 

Sin Embargo / Por Redacción / 27 Agosto 

 

Acuerdo entre México y EU en TLCAN podría ser antes del 25 de agosto

Forbes México / 20 Agosto

 

De acuerdo con Ildefonso Guajardo, secretario de Economía, las pláticas han tenido bastante progreso.

Notimex.- Las negociaciones entre México y Estados Unidos para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) entraron a una semana, con signos de un posible acercamiento de posiciones para alcanzar un acuerdo en principio antes del 25 de agosto.

Los equipos técnicos de las dos delegaciones retomaron en esta capital las pláticas, luego de tres días de intensos encuentros ministeriales la semana pasada, y donde a decir del secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, hubo bastante progreso.

Guajardo dijo el viernes que en las pláticas de este lunes se abocarían a la discusión de temas sectoriales, incluyendo algunos del ámbito financiero, en tanto que el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, señaló por separado que las dos partes se estaban acercando a un acuerdo.

El reporte de Guajardo apuntó avances en el ámbito de las reglas de origen en el sector automotriz, que se refieren a porcentajes y origen de las partes de los automóviles o camiones ligeros para el mercado norteamericano, armados en cualquiera de ambos países y Canadá, el tercer socio del TLCAN.

El tema es de los más contencioso por la demanda de la Casa Blanca de elevar de 62.5 a 75% el contenido regional de estas partes, y que la mitad sean producidas en Estados Unidos.

De acuerdo con un reporte de prensa, Estados Unidos habría desistido de su demanda de restringir las importaciones agrícolas mexicanas mediante calendarios para su ingreso al mercado estadunidense, una propuesta conocida como ‘estacionalidad’.

Los dos países estarían cerca también de alcanzar un acuerdo sobre la cantidad limite para evitar el pago de aranceles en compras electrónicas internacionales, que en el caso de México es actualmente de 50 dólares.

Hasta la semana pasada, temas como la cláusula ‘sunset’, mediante la cual Estados Unidos busca revisar el acuerdo cada cinco años y a lo que tanto México como Canadá se oponen, no habían sido abordados y Guajardo recalcó que este tipo de asuntos serían abordados hasta el final.

Aunque las negociaciones deberán pasar a la fase trilateral con la incorporación de Canadá, esta semana será crucial en el proceso.

Ambos gobiernos han declarado su intención de lograr un acuerdo antes del cambio de gobierno en México, el próximo 1 de diciembre.

Ello requiere un acuerdo preliminar este sábado 25 de agosto, ya que bajo la Ley de Promoción Comercial (TPA), la administración estadunidense debe notificar al Congreso con 90 días de anticipación antes de la firma de cualquier acuerdo.

 

Forbes México / 20 Agosto

 

Firma de TLCAN 2.0, antes de diciembre: Seade

El Financiero / Mariana León / 6 Agosto

 

El encargado de la renegociación del TLCAN del gobierno de transición de AMLO aseguró que la industria automotriz no está entorpeciendo el diálogo.

El nuevo acuerdo del Tratado de Libre Comercio de América del Norte podría firmarse antes del primero de diciembre, aseguró Jesús Seade, encargado de la renegociación del TLCAN del gobierno de transición de Andrés Manuel López Obrador.

A su salida de la casa de transición, se le preguntó sobre el rumbo de las negociaciones y aunque no entró en detalles, dijo que podría estar antes del primero de diciembre.

“Estamos llegando a los temas que no se han avanzado. Cada vez estamos más cerca, pero al mismo tiempo enfrentando la realidad de lo que no se ha manejado «.

Comentó también que no son las condiciones de la industria automotriz las que están entorpeciendo las negociaciones.

«Ningún tema en particular. No quiero entrar en detalles, se negocia mejor en el silencio, pero estamos trabajando para que se pueda firmar antes del primero de diciembre”.

Esta mañana el secretario de Economía mexicano, Ildefonso Guajardo, dijo que México ha puesto en la mesa de negociación con Estados Unidos una contrapropuesta sobre reglas de origen de automóviles para la modernización del TLCAN, y está estudiando la planteada por Washington.

“Nosotros tenemos una propuesta en la mesa, estamos analizando algunas de las características de la posición norteamericana, y lo estamos haciendo claramente en función de un diálogo que tenemos con la industria automotriz mexicana, pero si quiero remarcar, todo el acuerdo aterriza conjuntamente, nada está acordado hasta que todo está acordado”, apuntó Guajardo al ser entrevistado en el marco de la inauguración del diplomado “Guillermo Aguilar Álvarez sobre negociaciones comerciales internacionales”.

El secretario aseguró que se está buscando avanzar en la negociación para darle certidumbre a los inversionistas por medio de la definición de acuerdos benéficos en las reglas de origen de los diversos sectores involucrados en las discusiones.

El Financiero / Mariana León / 6 Agosto

Renegociación del TLCAN tuvo un progreso ‘increíble’: asesor de Trump

El Informador / 

 

Una docena de capítulos, entre ellos el textil y energético, podrían cerrarse en los próximos días

Estados Unidos está haciendo un progreso “absolutamente increíble” en torno a las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y se podría llegar a un acuerdo en otoño, señaló el presidente del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, Kevin Hassett.

“Creo que veremos algo para otoño”, dijo Hassett en una entrevista para Fox News.

Mientras advertía que no era “un negociador” involucrado en las negociaciones entre Estados Unidos, México y Canadá, Hasset afirmó que sus colegas que están renegociando el acuerdo han indicado que las cosas están yendo bien.

“Es absolutamente increíble el progreso que están haciendo”, señaló.

No soy un negociador involucrado en las negociaciones… (pero) mis colegas indican que las cosas están yendo bien

El comentario de Hassett hizo eco del Representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer, quien dijo el 26 de julio ante el Congreso que es posible que los socios del TLCAN lleguen a un acuerdo tentativo en agosto para renovar el pacto.

El presidente Donald Trump también ha dicho recientemente que Estados Unidos está avanzando sólidamente en las conversaciones con México, pero ha indicado que su administración puede buscar primero un acuerdo bilateral con este país antes de negociar por separado con Canadá.

Una docena de capítulos, próximos a cerrarse 

Una docena de capítulos, entre ellos el textil y energético, podrían cerrarse en los próximos días para avanzar en la renegociación del TLCAN, informó Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y parte del ‘cuarto de junto’, grupo de la iniciativa privada que acompaña al gobierno en el proceso.

“Textiles, que ha sido un capítulo difícil; energía que nos da mucha potencialidad en la zona si hacemos sinergia entre los tres países; medio ambiente, aduanas y facilitación comercial; medidas disconformes; servicios financieros e inversión; comercio transfronterizo; comercio digital y anexo sectorial de cosmético. Estos son los capítulos cercanos a terminar y quedarían 8 o 10 capítulos adicionales y dentro de ellos están el tema laboral, de propiedad intelectual, que son temas aún en la mesa de negociación y que para nosotros es importante profundizar”, señaló el líder empresarial.

En una llamada telefónica con medios desde Washington, Castañón se mostró confiado, ya que identificó un claro interés por parte de Estados Unidos para avanzar en las negociaciones del TLCAN y llegar a un acuerdo en principio.

“En el ambiente de lo que vivimos, se sigue pensando que durante agosto estaríamos usando esta ventana de oportunidad y hay la voluntad para hacerlo”, señaló el empresario.

El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, detalló en Washington que los equipos negociadores convinieron iniciar con los temas menos complicados, para avanzar luego hacia los más complejos, y espera que Canadá participe tanto en las reuniones bilaterales, como trilaterales con Estados Unidos.

El jueves se reanudaron en Washington las conversaciones para actualizar el pacto comercial con reuniones ministeriales entre Estados Unidos y México, tras haberse estancado desde mayo, debido a algunas demandas estadounidenses controversiales y en espera de las elecciones presidenciales de México.

Buscan fórmula para reglas de origen

En el tema de las reglas de origen se avanza en las negociaciones con una fórmula que pueda ser factible, que no dañe los empleos en México, ni las nuevas inversiones dirigidas al mercado mexicano, “pero aún no se concreta”, reconoció el presidente del CCE.

Están sobre la mesa con “raya roja”, en las que México no va a ceder, el capítulo de estacionalidad, la cláusula sunset y Capítulo 20 sobre resolución de controversias gubernamentales. En el Capítulo 11 sobre seguridad para las inversiones, los empresarios estadounidenses son los que presionan para que se mantenga, detalló.

Eliminación de sanciones 

En caso de que el acuerdo trilateral se pueda dar, desaparecerían las sanciones de aranceles, tanto en materia de acero automotriz con la eliminación del estudio que hacen en la 232, y las tarifas de acero y aluminio. A la par, México eliminaría las sanciones de respuesta que se dieron, aseguró Castañón.

Hoy ya hay repercusiones en los precios en Estados Unidos y la Casa Blanca en Estados Unidos está consciente de que si se logra un acuerdo se eliminarían esas sanciones.

 

El Informador / 

 

Acuerdo integral con EU: AMLO

El Sol de Tijuana / Laura Bueno Medina / 3 Julio

 

El aporte a la economía mexicana desde Estados Unidos es muy relevante; se traduce en alrededor de 27 mil millones de dólares al año.

Tijuana.- Con Andrés Manuel López Obrador como presidente electo, se vislumbra una posibilidad de tener una nueva relación colaborativa entre México y Estados Unidos de América, señaló el investigador del Colegio de la Frontera Norte, José María Ramos al ser cuestionado sobre si el cambio de gobierno traería una mejora en la relación de ambos países.

El doctor dijo que la política internacional de Andrés Manuel se enfrentará a casi dos años en los que el presidente Peña Nieto no se ha entrevistado con el presidente Donald Trump.

La oportunidad de entablar relaciones ya inició después de la llamada de este lunes entre ambos mandatarios, apuntó el investigador de El Colef.

El aporte a la economía mexicana desde Estados Unidos es muy relevante; se traduce en alrededor de 27 mil millones de dólares al año; por ello, expresó el investigador, no se puede abandonar la relación diplomática.

No obstante, el trato digno debe ser punto de partida, para garantizar un entendimiento entre los gobiernos.

La posibilidad de que AMLO realice una visita a EEUU estaría justificada en la gira por los estados con gran población mexicana que el ahora presidente electo había mencionado que realizaría a partir del mes de septiembre, días en los que tendría lugar una entrevista entre ambos presidentes.

Ramos explicó que tendría mayor impacto para México que el presidente electo fuera a Estados Unidos en reconocimiento de los ciudadanos mexicanos que viven en aquel país y votaron por él, que, seguramente, sería un 90% de ellos.

En un mensaje vía Twitter, el presidente electo informó que sostuvo una conversación con el presidente de Estados Unidos de América, Donald Trump, este lunes, en la cual se habló de “explorar un acuerdo integral”, el cual incluye proyectos para desarrollo, mismo que generen empleos en México.

Con lo anterior se estima reducir la migración de México hacia Estados Unidos, además de mejorar la seguridad en la frontera.

El diálogo lo continuarían los representantes de ambos presidentes bajo un trato respetuoso, como el que mantuvieron ellos.

Añadió que el nuevo secretario tendría que iniciar las conversaciones con su homólogo en el entendido de centrar el diálogo en las negociaciones del Tratado de Libre Comercio, la segunda, y el contexto de la frontera.

El presidente de Estados Unidos ya había manifestado su felicitación a AMLO durante la misma noche del domingo ante la tendencia que mostraba una contundente ventaja para López Obrador.

El gran reto de la alternancia democrática es convertirse en una administración eficaz, y generar las políticas públicas que sean aplicables para el desarrollo de todo el país, concluyó el investigador.

 

El Sol de Tijuana / Laura Bueno Medina / 3 Julio

 

Economía mexicana resiste al TLCAN y al proceso electoral

El Horizonte / 26 Junio

 

En 2017, México registró un crecimiento de 2% y un 1.3% interanual en el primer trimestre del 2018, según datos del Inegi.

Con un crecimiento moderado pero continuo, la economía mexicana resiste a la difícil renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y la incertidumbre generada por el proceso electoral del 1 de julio próximo.

«Aunque no es el panorama más sencillo, la economía está bien. Llevamos 33 trimestres creciendo, y esto es altamente inusual», afirmó el director general adjunto del Inegi (IMCO), Manuel Molano.

En 2017, México registró un crecimiento de 2% y un 1.3% interanual en el primer trimestre del 2018, una ralentización atribuida a la Semana Santa, que cayó en marzo y restó días laborables.

Aunque la tasa de crecimiento no es apabullante, equivale al «promedio de los últimos diez años», puntualizó la directora Ejecutiva de Análisis Económico y Estrategia de Banorte, Delia Paredes.

El PIB mantiene una trayectoria positiva impulsado por factores como la demanda interna, aupada por una positiva confianza del consumidor.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el consumo privado creció 2.6% anual entre enero y marzo.

Se le sumó el consumo de gobierno, con un alza del 1.1% tras tres trimestres en rojo, subrayó Paredes, que pronostica que el país crecerá 2.5% este año.

La solidez económica se tradujo en más puestos de trabajo con un desempleo de apenas el 3.4% en abril, y 3.6 millones de empleos formales creados en esta administración.

Molano destacó que México tiene una deuda pública creciente y déficit en la balanza de pagos. Y todo ello en medio de un escenario global convulso por las decisiones del gobierno de Estados Unidos en materia comercial, como la imposición de aranceles.

Donald Trump tiene en el punto de mira a la segunda potencia latinoamericana después de Brasil tras calificar de «terrible» el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. (Agencias)

 

El Horizonte / 26 Junio

 

 

El simple temor de una guerra comercial está generando tensiones en la economía global

LONDRES — Tan solo hace unos cuantos meses, parecía que la economía global era vibrante y las principales economías crecían al unísono. Ahora, las fortunas del mundo están en peligro por una guerra comercial en desarrollo.

A medida que el gobierno de Trump impone aranceles tanto a sus aliados como a sus rivales —y provoca amplias represalias— el comercio global sufre trastornos y da señales de tensiones que podrían obstaculizar el crecimiento económico. La última escalada llegó el 15 de junio, cuando el presidente Donald Trump anunció nuevos aranceles de 50.000 millones de dólares en productos chinos, lo que provocó una rápida represalia de Pekín.

Conforme crece el conflicto, se retrasan los embarques en los puertos y las terminales de carga aérea en todo el mundo. Los precios de materias primas claves se están incrementando. En las fábricas desde Alemania hasta México, se reducen los pedidos y se retrasan las inversiones. Los agricultores estadounidenses pierden ventas a medida que los socios comerciales responden con impuestos propios.

Los trabajadores de una acerería canadiense pelearon por retirar unos vagones de ferrocarril con destino a la frontera de Estados Unidos después de que este mes Trump lanzó aranceles sobre los metales importados. Un cliente de Seattle canceló su pedido con rapidez.

“El impacto se sintió de inmediato”, afirmó Jon Hobbs, presidente de AltaSteel en Edmonton. “En verdad nos estamos dando cuenta de lo que esto significa para los negocios de la gente”.

El gobierno de Trump describe su postura confrontativa como un medio para obligar a las empresas multinacionales a regresar la producción de las fábricas a las costas estadounidenses. Trump ha descrito las guerras comerciales como “fáciles de ganar”, mientras promete volver a equilibrar los déficits de Estados Unidos con las principales economías, como la china y la alemana.

Sin embargo, la ofensiva de Trump podría ser una táctica de negociación que amenace con provocar problemas económicos para obligar a que haya acuerdos, y no una medida que conduzca a una franca guerra comercial. Parece que los estadounidenses están mejor protegidos que la mayoría para enfrentar las consecuencias de estas hostilidades comerciales. Como una gran economía relativamente en buena forma, Estados Unidos puede encontrar compradores locales para sus bienes y servicios cuando se reduzcan las oportunidades de exportación.

Aun así, la historia ha demostrado que las guerras comerciales son costosas mientras aumentan los riesgos de hostilidades más abiertas. Se profundizan los temores de que el actual brote de antagonismo pueda afectar al resto del mundo.

Antes de que las medidas comerciales entren totalmente en vigor, los negocios ya están sufriendo las consecuencias: amenazas a sus suministros, incertidumbre acerca de los términos comerciales y un persistente temor acerca de lo que vendrá después.

“Tan solo hablar de proteccionismo crea problemas”, señaló Marie Owen Thomsen, economista jefa a nivel mundial en Indosuez Wealth Management en Ginebra. “Es un riesgo existencial para la economía mundial”.

Después de dos años de expansión, el tráfico de carga aérea se mantuvo sin cambios durante los tres primeros meses del año, según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo. Las caídas han sido pronunciadas, sobre todo en Europa y Asia.

Los buques portacontenedores —los caballos de batalla del comercio global— no han tenido crecimiento en mercancía desde el otoño pasado en términos desestacionalizados, de acuerdo con un índice clave.

Un indicador de comercio mundial monitoreado por Oxford Economics, una empresa de investigación de Londres, registró recientemente su actuación más débil desde principios de 2017.

“No subestimemos el impacto macroeconómico”, advirtió la semana pasada la directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, acerca de los conflictos comerciales. “Sería grave, no solo si Estados Unidos actuara, sino en especial si otros países tomaran represalias, sobre todo los más afectados, como Canadá, Europa y Alemania”.

Están surgiendo amenazas para el comercio justo cuando la economía global se enfrenta a otros retos importantes.

La decisión del gobierno de Trump de restablecer sanciones a Irán ha aumentado los precios del petróleo, lo que aumenta la presión sobre los importadores de todo el mundo. La economía de Europa se está debilitando y la de Alemania —la economía más grande del continente— es particularmente vulnerable. Los bancos centrales en Estados Unidos y Europa están retirando el dinero barato que enviaron a recorrer el sistema financiero global después de la crisis de 2008, lo que aumenta el costo de los préstamos.

El gobierno de Trump ha involucrado a Estados Unidos en conflictos cada vez más enconados con grandes socios comerciales.

Estados Unidos importó el año pasado más de 600.000 millones de dólares en bienes y servicios de Canadá y México, los otros dos países del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, mismo que Trump ha amenazado con acabar. Los estadounidenses compraron más de 500.000 millones de dólares de mercancía china y otros 450.000 millones de dólares de la Unión Europea. En total, eso suma casi dos tercios de todas las importaciones de Estados Unidos.

“Si perjudicas seriamente a cualquiera de estos tres, sentirás los efectos”, dijo Adam Slater, economista principal de Oxford Economics. “Si perjudicas a los tres al mismo tiempo, sentirás los efectos considerablemente”.

Para las empresas que fabrican acero y aluminio, los aranceles de Estados Unidos han planteado un reto directo y amenazante para sus negocios.

En Alta, la acerería de Edmonton, los aranceles sobre metales provocaron una crisis inmediata. Aproximadamente una quinta parte de los negocios de la empresa tiene que ver con embarcar acero a los clientes estadounidenses.

De forma repentina, la frontera que separa Canadá y Estados Unidos en efecto se llenó de niebla. La empresa cambió el rumbo de los vagones destinados a clientes de Estados Unidos, incurriendo en cargos extras por carga que llegaron a 100.000 dólares canadienses (alrededor de 76.000 dólares).

Los abogados de algunos clientes de Alta han sugerido que se podrían clasificar algunos productos para evitar tocar los aranceles estadounidenses, los cuales se aplican solo a ciertos tipos específicos de acero. Pero por ahora, la empresa está esperando la decisión de los abrumados funcionarios de aduanas de Estados Unidos.

“No sabemos cuándo tendremos una respuesta del gobierno de Estados Unidos”, señaló Hobbs. “Nadie, incluyendo la agencia de protección de la frontera de Estados Unidos, sabe qué hacer”.

En toda Europa, los fabricantes de acero se preocupan por una consecuencia indirecta de los aranceles de Trump: el acero barato de China que anteriormente se destinaba a Estados Unidos, ahora se dirige a su continente.

“Hemos visto incrementos”, afirmó Mathias Ternell, director de relaciones internacionales en Jernkontoret, una asociación sueca de la industria del acero en Estocolmo. “Es por lo que las empresas suecas y europeas más se preocupan”.

Trump describe las hostilidades comerciales como un correctivo necesario para los déficits comerciales de Estados Unidos con otros países. Pero los economistas y los líderes empresariales señalan que muchas importaciones son componentes que se emplean para producir bienes en las fábricas de Estados Unidos.

Para los compradores de acero y aluminio dentro de Estados Unidos, los aranceles han incrementado los precios, lo que desalienta la inversión.

Electrolux, el fabricante sueco de artículos para el hogar, recientemente pospuso sus planes de mejorar una fábrica de estufas en Tennessee, utilizando como argumento las incertidumbres creadas por los aranceles.

En los suburbios de Austin, Texas, Matt Bush, vicepresidente de una pequeña empresa que hace estructuras que se emplean en edificios de oficinas y locales comerciales, dijo que los aranceles del acero obligarían a su empresa a pagar hasta 50.000 dólares más al mes por el metal.

“Tienes que imaginar que toda la gente que está comprando aluminio y acero en bruto como insumos para su negocio está en el mismo predicamento”, afirmó. “Y quizá es sorprendente hasta dónde pueden llegar las consecuencias”.

Más allá del ámbito del metal, el impacto de las escaramuzas comerciales se está ampliando y está golpeando a pequeñas empresas y consumidores.

En México, la angustia acerca del comercio ha prevalecido desde que Trump tomó posesión, debido a sus amenazas de anular el TLCAN y sus planes de construir un muro a lo largo de la frontera. Los mexicanos comunes y corrientes han absorbido el golpe porque el peso mexicano se ha hundido y ha aumentado el costo de los bienes cotidianos procedentes de Estados Unidos.

“Ese presidente nos está llevando a la quiebra”, señaló Gustavo Ferreyra Olivares, un vendedor de fruta que ha tenido un puesto en un mercado de Ciudad de México durante 35 años. “Trump es el que ha subido los precios”.

La mayor parte de la fruta fresca de su puesto se cultivó en México, pero las manzanas Granny Smith, acomodadas en cajas de cartón, tenían la etiqueta de Estados Unidos, al igual que una pila de relucientes manzanas Gala e hileras ordenadas de Red Delicious.

Con el TLCAN, México se ha convertido en el mayor importador de manzanas estadounidenses en el mundo. Pero las ventas son bajas porque el precio ha subido casi una quinta parte tan solo durante la semana pasada.

El gobierno mexicano impuso hace poco aranceles del 20 por ciento a las manzanas estadounidenses en respuesta a los aranceles de Trumpsobre el acero, lo que dificultará más a Ferreyra vender sus productos estadounidenses. Se imagina que los agricultores del otro lado de la frontera están sufriendo también.

“México es un gran importador de manzanas”, afirmó. “Si decidimos boicotearlos, todos tendrán que mantenerse ahí”.

Los mercados de bienes básicos globales están luchando con los impactos del conflicto comercial, en especial China, que busca alternativas a los proveedores estadounidenses.

En años recientes, conforme han crecido los rangos de la clase media de China, también lo ha hecho el apetito nacional por la carne de puerco. El aumento en la cantidad de cerdos ha obligado a China a importar cada vez más volúmenes de soya de Estados Unidos.

Pero China ha apuntado directamente a las granjas de Estados Unidos como represalia a los aranceles de Trump sobre los metales y ha amenazado con impuestos a la soya procedente de Estados Unidos. Los productores de puerco de China han volteado a ver a Brasil y Argentina, los únicos países que ahora producen suficiente soya como para ofrecer una alternativa potencial al suministro de Estados Unidos.

Fortalecer mercado interno ante posible fin del TLCAN: investigadores

La Jornada / Susana González G. / 11 Junio

 

Ciudad de México. Investigadores en economía de la UNAM, del Colegio de México y del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC) coincidieron que México debe fortalecer su mercado interno y la industria nacional ante la posibilidad de que termine el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pero también para hacer frente a la incertidumbre que las presiones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, causan en la relación bilateral y el orden mundial establecido desde que terminó la segunda guerra mundial.

Al apostar a la liberalización de la economía y la atracción de inversión extranjera como estrategia de crecimiento, con el TLCAN incluido, se desmanteló y demolió el aparato productivo nacional que había tardado más de cuatro décadas en construirse y que pudo servir de base para el desarrollo industrial del país, sostuvo José Antonio Romero Tellaeche, director del Centro de Estudios Económicos del Colmex durante el seminario México 2018, la responsabilidad del porvenir, en el que participaron 40 especialistas de 30 instituciones de educación superior del país y el cual fue convocado por el IDIC.

Destacó que en los últimos 35 años el producto interno bruto (PIB) por habitante apenas creció 0.7 por ciento, “el más bajo en la historia contemporánea de México, sólo ligeramente por arriba del periodo combinado de la Revolución y la Gran Depresión, de 1914 a 1934, cuando fue de 0.6 por ciento”. En el mismo periodo México perdió 23 lugares en un ranking mundial sobre los ingresos por habitante, al pasar del sitio 41 en 1980 al 64 en 2015 entre 105 países analizados.

Si bien Romero dijo que la terminación del TLCAN colocará a México en una situación crítica en el corto plazo porque toda la estructura industrial está forjada con ese fin y será “un golpe mortal” a la estrategia de crecimiento adoptada en los últimos 6 sexenios, también mencionó que su fin “abre nuevas posibilidades para redefinir la estrategia económica, el proyecto de país y nos obliga a pensar en una nueva estructura industrial con empresarios y marcas nacionales capaces de exportar no sólo a Estados Unidos sino al resto del mundo, con una remozada intervención del Estado”.

A su vez, José Luis de la Cruz, director del IDIC consideró que si deja de existir el TLCAN y México no mantiene la fortaleza productiva del mercado interno, el PIB puede caer entre medio punto y un punto porcentual.

En la cumbre del G7 realizada el fin de semana, Estados Unidos rompió la alianza tradicional que mantenía con sus aliados europeos y Japón, por lo que el contexto internacional se va a modificar y se están trastocando los organismos internacionales que fueron creados después de la segunda guerra mundial, particularmente para el comercio e intercambio económico global. “Lo que tenemos que ver es hacia dónde van las nuevas reglas y cómo van a jugar China, Rusia e India porque al mismo tiempo que se fracturaba el G7, allá se estaban estrechando la mano y generando nuevas alianzas”, abundó.

“Si Estados Unidos trae proteccionismo, China trae proteccionismo, Rusia evidentemente lo tiene y la Unión Europea se está reconfigurando, lo que tiene que hacer México es fortalecer sus capacidades internas. Yo no lo llamaría proteccionismo sino la necesidad de lograr capacidades productivas, de empleo y bienestar social al interior del país porque no podemos seguir dependiendo de lo que ocurra en otras naciones”, puntualizó De la Cruz, entrevistado durante el foro.

Para Francisco Suárez Dávila, maestro en Economía y ex embajador de México en Canadá, México acumuló 35 años “de estancamiento estabilizador” con el TLCAN al convertirse en “una gigantesca maquiladora” y basar su crecimiento en las exportaciones, con lo cual sólo se fortalecieron las cadenas productivas pero hacia afuera. Pero ese modelo de política económica que se supeditó al TLCAN está llegando a su fin porque Trump ha hecho en un año lo que la política neoliberal no logró en 18 años, así que se debe cambiar el rumbo del país con una estrategia con un Estado “desarrollador” actuando con la sociedad y que privilegie el crecimiento económico.

Criticó que pese a todos los ataques de Trump, el equipo mexicano que negocia el TLCAN se mantenga sentado a la mesa en lugar en lugar de que se levante sin que ello implique denunciar o abandonar el tratado. Eso que lo haga Estados Unidos si así lo quiere, pero mientras tanto continúa el intercambio comercial bilateral, con o sin tratado, como ocurre entre ese país y China que no tienen acuerdo comercial al respecto, dijo el ex embajador.

El coordinador del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo de la UNAM, Rolando Cordera, mencionó que además de la reindustrialización, el Estado mexicano no debe renunciar a su compromiso de promover el desarrollo económico, que es distinto al crecimiento económico donde sólo una élite se beneficia. Puede darse, dijo, “un nuevo desarollismo, una combinación entre Estado promotor, nueva industrialización y estado social. No se trata de volver atrás ni reinventar la sustitución de importaciones, sino poner al día la estrategia de industrialización dirigida por el Estado”.

Francisco Cervantes Díaz, dirigente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), manifestó en el seminario que «por 40 años hemos estado obsesionados por la estabilidad económica ya es hora de entrar en la obsesión del crecimiento económico».

Raúl Gutiérrez Muguerza, presidente del IDIC, criticó que pese al crecimiento de las exportaciones la economía nacional no ha crecido más allá del 2 por ciento anual y las brechas de la desigualdad se abren cada vez más. Aclaró que nadie pide volver al proteccionismo de los 70 pero tampoco se debe ser dogmáticos y primero se requiere ser fuertes al interior, con una base productiva nacional, y luego salir al mundo.

 

La Jornada / Susana González G. / 11 Junio